Una vez finalizada la época
de lluvias y dentro de la época más seca del año debido a las altas
temperaturas y a la escasez de agua.
El camino continúa
manteniendo la misma estructura que cuando se ejecutó la obra en mayo del 2013,
no se han producido irregularidades en la superficie que dificulten o
imposibiliten la circulación de vehículos, no se ha realizado ningún
mantenimiento desde el día de su ejecución, lo que ha supuesto a la propiedad
un ahorro importante. También podemos comprobar que la emisión de polvo por
desprendimiento se ha reducido considerablemente en esta época del año gracias
a la estabilización conseguida.
